MODASA: 47 años, liderazgo y exportaciones a 25 países

Proveedor de buses, grupos electrógenos y otros equipos para la minería

MODASA - Motores Diesel Andinos S.A. es una empresa industrial peruana con más de 47 años de experiencia, consolidada como líder en el diseño, fabricación y mantenimiento de motores diésel y equipos asociados. La reconocida calidad de sus productos les ha permitido exportar con éxito a más de 25 países en toda la región, incluyendo mercados altamente exigentes como el de Estados Unidos.

Su portafolio incluye buses, grupos electrógenos, torres de iluminación, motobombas, sistemas contra incendios, entre otros, con presencia tanto a nivel nacional como internacional. Este liderazgo se sustenta en el uso de tecnología de vanguardia, certificaciones de reconocimiento global y una sólida red de soporte técnico y servicio postventa.

“Somos distribuidores oficiales de motores Perkins, FPT, HDI, y representantes autorizados de Volvo Penta y Weichai, marcas que están integradas en los equipos que comercializamos y que también conforman nuestra flota de alquiler de grupos electrógenos”, señaló Roggero Olivares.

MODASA se ha consolidado como un proveedor confiable de buses y grupos electrógenos para las principales compañías mineras del Perú, entre las que destacan Antamina, Chinalco, Shougang, Quellaveco, entre otras. Sus grupos electrógenos, equipados con motores Perkins, Cummins, Mitsubishi, SDEC, FAW y Hyundai, están especialmente adaptados para operar en condiciones extremas de altitud, temperatura y humedad, lo que los convierte en soluciones ideales para suministrar energía continua en zonas remotas del sector minero.

“Por ejemplo, en el año 2016, diseñamos y fabricamos el grupo electrógeno móvil más potente del país, con una capacidad de 1.2 MW, destinado a la minera Chinalco y preparado para operar a una altitud de 4,500 m s.n.m. Actualmente, nuestra área de Alquileres de Grupos Electrógenos ofrece soluciones de respaldo energético para operaciones mineras, con un rango de potencia que va desde los 18 kW hasta los 1,285 kW”.

En cuanto a transporte, su participación en el rubro minero se centró en el traslado de personal, principalmente con el modelo Apolo X. “Nos enorgullece contar además con dos buses eléctricos E-Apolo actualmente en operación en La Poderosa y Antapaccay. Como parte de nuestra apuesta por la innovación, la Unidad de Buses ha lanzado recientemente su nuevo modelo de bus eléctrico, el E Zeus 360, que incorpora asientos ergonómicos

renovados, sistemas de seguridad de última generación y un diseño aerodinámico optimizado para ofrecer mayor eficiencia y confort”.

Con relación al servicio postventa, la compañía ofrece atención integral en todas sus sucursales ubicadas en las principales ciudades mineras del país: Arequipa, Cusco, Trujillo, Piura, Cajamarca, Lima, Ica y Huancayo.

En estas sedes se proveen repuestos originales y se realizan servicios de mantenimiento, además de la gestión de contratos de servicio y alquiler de equipos, tales como grupos electrógenos, torres de iluminación, tableros de distribución y sincronismo, subestaciones y compresoras móviles, entre otros.

“Contamos con una moderna sala de reparación de motores, equipada con un banco dinamométrico de hasta 600 HP, y pronto incorporaremos un segundo dinamómetro de hasta 1,200 HP, lo que nos permitirá ampliar nuestra capacidad de atención, especialmente para satisfacer las exigencias del sector minero”.

Cristian Roggero Olivares, Gerente de Postventa de MODASA, explicó que al interior de una mina se presentan condiciones extremas, como espacios confinados con escasa ventilación, alta concentración de polvo y gases, exposición a temperaturas elevadas y niveles significativos de humedad. En este contexto, los motores deben minimizar las emisiones de NOx, incorporar sistemas de postratamiento, ser de diseño compacto, perfil bajo y encapsulado, además de contar con protección IP, sistemas de filtrado ciclónico y sellos reforzados para garantizar su desempeño.

Agregó que, en operaciones a tajo abierto, especialmente a altitudes superiores a los 4,000 m s.n.m., estas piezas se enfrentan a ambientes con menor presión atmosférica, baja disponibilidad de oxígeno, marcadas variaciones térmicas entre el día y la noche, así como a la presencia de polvo abrasivo y fuerte radiación solar. “Por ello, según la altitud, deben estar equipados con turbocargadores de geometría variable para compensar la pérdida de potencia. Asimismo, requieren ajustes en la relación aire-combustible mediante los módulos de control ECM, a fin de evitar combustiones pobres o acumulación excesiva de hollín”.

Respecto a cómo se determina la vida útil y qué indicadores se monitorean durante su operación para anticipar fallos, señaló que en un motor diésel esta se evalúa principalmente en función de las horas de trabajo, el consumo de combustible y la cantidad de carga transportada. Estos factores están directamente vinculados a la calidad del lubricante, las condiciones térmicas del entorno, la altitud de operación y la regularidad del mantenimiento preventivo.

“En el caso de un equipo eléctrico, la vida útil se establece considerando las horas de funcionamiento, los ciclos térmicos y el estado del aislamiento. Estos elementos dependen fundamentalmente de la calidad del bobinado, la eficiencia del sistema de enfriamiento, así como de las condiciones de carga y posibles sobrecargas. Además, resulta crucial el nivel de contaminación de polvo, humedad y vibraciones, a las que está sometido el motor”.

Asimismo, Roggero Olivares resaltó que proporcionan soporte técnico y comercial especializado, a cargo de profesionales altamente capacitados, quienes brindan asesoría remota y presencial para resolver cualquier eventualidad técnica. “También damos capacitaciones en operación de equipos, así como formaciones técnicas orientadas al mantenimiento idóneo”.

Fuente: Revista Rumbo Minero